Madre, los que viven en las nubes me gritan:"Mira; jugamos desde nuestro despertar hasta que se muere el día; jugamos con el amanecer de oro y con la luna de plata." Yo les pregunto: "Pero, ¿cómo subiré hasta donde estáis vosotros?" Y me contestan: "Llega hasta el borde de la Tierra, alza las manos al cielo y las nubes te levantarán." "Mi madre me está esperando en casa -digo yo-¿Cómo dejarla y subir?" Y ellos se sonríen y pasan flotando.
Pero yo sé un juego más bonito que ése madre. Mira: Yo seré una nube y tu serás la luna. Te taparé con mis manos y nuestro techo será el cielo azul.
Rabindranath Tagore
3 comentarios:
Hay juegos que más que juegos son auténticos sueños.
Este me ha parecido de una belleza sublime.
Besos.
Y para esas nubes mi suspiro de paz y esperanza. Gracias mi querida Armida.
Un abrazote
Carlos Eduardo
Qué lindo, y qué dulce relato Armida!
Un beso grande!
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