Para no extrañar la suya.
Iniciar la muda por mi boca
Deshaciendo sus besos, con bronca.
Frotar mis ojos para sitiar,
Sus negros cielos,
Arrancándome de sus miradas,
Que apuñalan mis libres mañanas.
Mudarme toda,
Como una media
Desde los pies a la cabeza
Desde el alma a la tristeza.
Quiero cambiar la piel
Para dejar de ser suya
Continuar la muda por mis manos
Deshaciendo sus roces apasionados.
Desecharé mi piel sin inclemencia
Despojándome del siempre de su presencia
Aunque dure un milenio de intentos,
Y otros tantos de arrepentimientos.

Mudarme toda,
Como una media
Desde los pies a la cabeza
Desde el alma a la tristeza
1 comentario:
Así será querida Alicia. Mudaremos para empezar a componer las sinfonías de la alegría y la tristeza; cambiaremos poco a poco y después dejaremos que sea el viento el que traiga los ecos del pasado. Hoy prmeto que mudaremos.
Un abrazote amiga, ¡Gracias!
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